Objeto Deseado

El discurso amoroso es hoy de una extrema soledad. Es un discurso tal vez hablado por miles de personas (¿Quién sabe?), pero al que nadie sostiene ; está completamente abandonado por los lenguajes circundantes: o ignorado, o despreciados, o escarnecido por ellos, separado no solamente del poder sino también de sus mecanismos (ciencias, conocimientos, artes). Cuando un discurso es de tal modo arrastrado por su propia fuerza e la deriva de lo intelectual, deportando fuera de toda precariedad, no le que más que ser el lugar, por exiguo que sea, de una afirmación.
Roland Barthes
Esta afirmación de R.B. es, en suma, el tema de este blog

Objeto Deseado

miércoles, 24 de noviembre de 2010

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